Bouge

Especialistas en servicios de asistencia y mantenimiento informático, desarrollo de páginas web y servicios en la nube

Phishing en 2025: Protege tu empresa de uno de los Ciberataques más comunes

El phishing sigue siendo una de las tácticas más utilizadas por los ciberdelincuentes para engañar a los empleados de empresas de todos los tamaños. En 2025, estos ataques se han vuelto más sofisticados, utilizando inteligencia artificial para imitar con precisión el lenguaje y el diseño de correos electrónicos corporativos. El objetivo es claro: Obtener acceso a datos sensibles, credenciales o incluso comprometer sistemas completos.

En este artículo te explicamos qué es el phishing, cómo identificarlo, y cómo proteger a tu empresa con soluciones efectivas. Adoptar una estrategia integral no solo ayuda a prevenir ataques, sino que también refuerza la cultura de seguridad dentro de la organización.

¿Qué es el phishing?

El phishing es una forma de ataque en la que un atacante se hace pasar por una entidad de confianza, normalmente mediante un correo electrónico o mensaje, para inducir a la víctima a revelar información confidencial o descargar malware. Los mensajes suelen venir de bancos o empresas con las que la organización interactúa o con las que tiene algún tipo de relación, pero también puede ser algo al azar.

A pesar de los avances en ciberseguridad, el phishing sigue funcionando porque se basa en el engaño emocional: Urgencia, miedo, confianza. Los atacantes conocen el comportamiento humano y lo utilizan a su favor. Este tipo de ciberataque no requiere vulnerabilidades técnicas, sino que explota errores humanos, lo que lo convierte en una amenaza persistente y difícil de erradicar por completo.

Formas comunes de phishing en 2025

  • Phishing por correo electrónico: Es el más frecuente, se utilizan plantillas de correo copiadas de empresas que son casi indistinguibles de las reales.
  • Smishing: Vía SMS, donde se incluyen enlaces a sitios falsos que suplantan entidades bancarias, servicios de mensajería o plataformas digitales.
  • Vishing: Llamadas de voz en las que un “soporte técnico” pide acceso remoto o datos personales haciéndose pasar por una empresa conocida.
  • Phishing con IA: Correos generados con modelos de lenguaje avanzados que imitan el tono y la forma de comunicación interna de tu empresa, haciendo más difícil su detección.

También han aparecido nuevas variantes como el pharming, en el que los usuarios son redirigidos a páginas web falsas mediante manipulaciones del sistema DNS, y el spear phishing, que se dirige a personas concretas con mensajes personalizados en función de su perfil o cargo dentro de la empresa.

Cómo reconocer un intento de phishing

Aunque algunos ataques son muy convincentes, aún existen señales que nos permiten detectar que estamos ante un intento de phishing:

  • Correos con sentido de urgencia o amenazas: “Su cuenta será suspendida en 24 horas”, “Ha recibido una factura pendiente”.
  • Dominios de correo electrónico ligeramente modificados: Por ejemplo, @microsfot.com en lugar de @microsoft.com o direcciones de correo electrónico que incluyen alguna palabra que permita reconocer a la empresa suplantada.
  • Enlaces acortados o con estructuras extrañas que no llevan al dominio original.
  • Archivos adjuntos sospechosos, especialmente si se trata de .zip, .exe o documentos de Office con macros.

También es importante desconfiar de solicitudes inesperadas de cambio de contraseña, transferencias urgentes de dinero o instrucciones fuera de los canales habituales de comunicación de la empresa.

Se recomienda complementar la detección manual con soluciones automáticas que analicen los correos entrantes en tiempo real y bloqueen amenazas antes de que lleguen al usuario final.

Consecuencias de un ataque de phishing

Un solo clic puede suponer:

  • Robo de credenciales y acceso a información interna: lo que puede derivar en robo de datos sensibles, espionaje corporativo o suplantación de identidades.
  • Instalación de ransomware o malware: los atacantes pueden cifrar tu información o tomar el control de la red.
  • Daño reputacional: tanto con clientes como con socios y proveedores.
  • Pérdida económica o interrupción del negocio: los sistemas pueden quedar inoperativos durante horas o días.

En algunos casos, los costes asociados al incidente incluyen sanciones por incumplimiento del RGPD, pérdida de contratos o demandas legales. El daño reputacional puede extenderse durante meses y generar una pérdida de confianza entre los clientes.

Puedes leer más sobre los riesgos del ransomware en este artículo del blog.

Cómo proteger a tu empresa del phishing

La protección frente al phishing requiere tanto herramientas tecnológicas como una correcta concienciación de los empleados. Además de la formación, es fundamental contar con sistemas de seguridad activos como firewalls y filtrado de contenido. Estas son algunas de las mejores prácticas que pueden aplicarse en cualquier empresa:

  • Formación al personal: Charlas periódicas sobre buenas prácticas de seguridad, incluyendo cómo detectar correos sospechosos, revisar enlaces antes de hacer clic y verificar siempre la dirección de correo del remitente.
  • Antivirus con detección de amenazas avanzadas: Soluciones con EDR (Endpoint Detection and Response) y protección en la nube.
  • Soluciones de correo seguras: Con filtrado automático de spam, detección de phishing y sandboxing de archivos adjuntos.
  • Autenticación multifactor (MFA): Para proteger el acceso incluso cuando las credenciales son robadas.
  • Simulaciones de ataques de phishing: Para medir el nivel de preparación del equipo, reforzar el aprendizaje práctico y crear una cultura de alerta ante correos inesperados o mensajes que contengan urgencias falsas.

Además, se recomienda comprobar manualmente que los enlaces contenidos en los correos electrónicos coincidan con la URL real del sitio web al que se pretende acceder. Un simple vistazo al destino del enlace pasando el cursor por encima puede evitar caer en una trampa. También es importante no descargar archivos adjuntos no solicitados, y reportar inmediatamente cualquier correo sospechoso al departamento de IT o responsable de seguridad.

También es recomendable configurar firewalls de nueva generación con funciones específicas para mitigar los riesgos asociados al phishing. Estas soluciones permiten:

  • Filtrado de contenido y DNS: Bloquean el acceso a sitios web maliciosos detectados en correos sospechosos.
  • Inspección profunda de paquetes (DPI): Detectan comportamientos anómalos en el tráfico entrante.
  • Filtrado de correo en la puerta de enlace: Escanean los correos antes de que lleguen al servidor interno.
  • Control de aplicaciones y segmentación de red: Limitan el acceso a aplicaciones no autorizadas y reducen el impacto si un usuario es comprometido.

Además, es clave contar con sistemas de backup seguros y planes de continuidad de negocio, para que, en caso de brecha, la recuperación sea rápida y eficaz. Las políticas de seguridad deben actualizarse periódicamente, adaptándose a los cambios tecnológicos y a la evolución de las amenazas.

La implementación de soluciones SIEM (Security Information and Event Management) también puede ser una herramienta valiosa para supervisar y analizar la actividad en tiempo real, generando alertas ante comportamientos anómalos. La inversión en seguridad es, cada vez más, una inversión en sostenibilidad empresarial.

Cuenta con un buen partner informático

El phishing evoluciona, pero también lo hacen las defensas. Con formación, soluciones tecnológicas adecuadas y un buen partner informático, tu empresa puede reducir de forma drástica el riesgo de sufrir un ataque. En Bouge te ayudamos a implementar sistemas de protección eficaces, formar a tu equipo y acompañarte en la mejora continua de tu seguridad.

Contacta con nosotros para proteger tu negocio desde hoy mismo o envíanos tu consulta a través de nuestro formulario de contacto y descubre también nuestros servicios de mantenimiento informático, gestión de licencias y ciberseguridad avanzada.